29.8.07

Una lástima.

Tanto para él que miente, para nosotros que ocultamos o para ella que se llena de actividades en forma adrede, las relaciones se tornan -lamentablemente- iguales. De todas formas es normal, la no-asociación vulnerable, pero es que en nuestros actos fallidos se entreven traumas, o sino -como hablamos antes- con el humor. Las risas nerviosas también lo hacen.El le dijo alguna vez "permanentemente estás buscando personas desaparecidas en tu vida, buscá bien, no sea que el desaparecido seas vos", y él se quedó helado y se retiró, y me lo contó y yo también abrí bien mis ojos, intentando ponerme en guardia.


Así de angulosa y tosca, denota y esconde simultáneamente todos los seres que habitan en ella.Dependiendo (precisamente) del ángulo desde donde se mire, la posición del viento y el sol, sus demonios salen a la luz, o simplemente sigue siendo L.La polifonía se vuelve histérica, su cabeza late así como su voz se transforma, hasta asimilar al ser de turno.Cambia su tez y la expresión de su cara.Los músculos se contraen y los ojos cobran arrugas (de esas que no denotan experiencia).Agita sus pies y trona sus dedos mientras L descansa en el fondo, con los demás.


No saqué los accesorios, y no fue la primera vez que no hice algo que dije que haría. Por eso es que precisamente no suelo comprometerme más que conmigo misma.No sólo no los saqué, sino que cada vez que estoy en la cama y los miro, me vienen millones de olores a la mente, y ahí es donde reposan los recuerdos. Se me entremezclan las cosas, porque algunos olores son los mismos. La máscara se viste de mis laberintos rojos y amarillos, y las fotos se vuelven traslúcidas. Entonces me siento en la cama, justo enfrentada a mí, cruzo mis piernas y me miro atentamente. Nos tocamos para sentirnos reales, y ahí es dónde ella me pregunta: - "¿ Hasta dónde querés llegar hoy?" -.Y la verdad es que no lo sé. Agarro mi almohada y apago la luz, aunque ella siga sentada en mi cama mirándome, esperando que diga algo, esperando que diga.

Luciana Barrufaldi.

2 comentarios:

buda dijo...

eeeemmmm....

Que paso aca?

Definitivamente logras sorprenderme dia a dia....

Jamás imagine encontrar un texto de Luciana Barrufaldi en tu blog.

Es la Luciana Barrufaldi que yo imagino no? Como llegamos a esto? De donde salio esto? Como te acordabas del apellido de Luciana?

Esto es muy confuso....

Melanina dijo...

Aclaraciones al margen...es loq ue hay.
Queda el recuerdo, aun mas el aprendizaje.

Que misterio....